El diácono Forrest Gray se retira del programa de capacitación para diáconos

Friday, Apr. 03, 2015

Traducido por: Laura Vallejo

SALT LAKE CITY — El diácono Forrest Gray se retiró como director del programa de formación para diáconos permanentes de la Diócesis de Salt Lake City; una posición que sostuvo desde el 2007. El diácono Gray fue ordenado en el 2004.

Este es un  retiro “en partes”, dijo el Reverendísimo John C. Wester, obispo de Salt Lake City, durante un almuerzo diocesano ofrecido en honor del diácono Gray. “Este es un nuevo capítulo en tu vida; ahora tendrás más tiempo para ti y para tus intereses”, dijo el obispo. “Esta es una oportunidad para agradecerte por todo lo que has hecho por nosotros y que sigues haciendo por nosotros, oramos para que tengas muchas alegrías, y unos muy buenos y saludables años venideros”.

Citando a San Francisco de Sales el obispo Wester dijo que el diácono Gray es “fuerte en su fe, fuerte en  su amor por el prójimo, fuerte en su habilidad de alcanzar y dar ayuda a las personas y con una gentileza y caballerosidad real. Ese es un gran ejemplo para todos nosotros y ha sido una gracia trabajar y hacer ministerio contigo”.

Durante sus comentarios el obispo Wester reconoció que el diácono y su esposa y su hijo “son un regalo que sigue dando”. María Cruz Gray es la directora diocesana de la Oficina del Ministerio Hispano; el Padre Christopher Gray es el Vicario Parroquial de la parroquia de San Pedro y San Pablo.

“Mi papá me enseñó todo lo que sé acerca del deber. Para un sacerdote esta es uno de los hábitos más importantes, tan solo un poco atrás del amor a Dios”, dijo el Padre Gray.

Varios diáconos de la clase del 2004 estuvieron presentes durante el almuerzo.

A lo largo de los años “lo que más he apreciado de tí, Forrest, no es solo tu amistad, sino que eres un tremendo caballero, siempre dispuesto a ayudar guiando y asistiendo; tu ánimo e impulso para la educación contínua ha sido fenomenal”, dijo el diácono Hershel Hester, de la parroquia de  Saint James the Just, en Ogden.

“Siempre me da alegría el hablar contigo y el poner una idea en marcha y tú siempre has respondido y me has guiado en la dirección que debería de estar. Te voy a extrañar y voy a extrañar tu lide-razgo y todo lo que has hecho por nosotros los diáconos”.

El diácono Jack Clark agregó que para el diácono Gray no fue una tarea fácil dirigir a tantos diáconos, pero él llevo el ministerio del diaconado, una asignación diocesana diaria “con dignidad, gracia, bondad y compasión. Le agradecemos a Dios habernos puesto en tu camino”.

Los años han pasado y “Forrest ha trabajado duro “agregó el diácono George Reade, canciller de la Diócesis de Salt Lake City. “Él ha llevado a cabo varias conferencias, realizó muchos viajes y evangelización del sur de Utah coordinando a los diáconos en la misma dirección, lo cual no fue una tarea fácil”.

Durante sus comentarios el diácono Gray agradeció al Canciller emérito de la Diócesis, el diácono Silvio Mayo por haberlo ayudado cuando se lo pidió al haber sido ofrecido el puesto que la Hermana Benedictina Jeremia Januschka dejó al morir inesperadamente.

“literalmente no sabía en lo que me había metido, y estoy muy contento que me pidiera seguir con ese trabajo”, dijo el diácono Gray. “Nada de esto fue mi idea,  simplemente sucedió”.

Sin embargo él contó con la bendición de su predecesora. Una vez en la que iba manejando junto con su esposa y la Hermana Je-remia, la Hermana Jeremia dijo ‘Forrest tú me vas a sustituir’, yo tan solo había sido diácono por unos cuantos años”, dijo el diácono Forrest. “Pensé ‘cómo es posible que reemplace a alguien como ella?, ella era formidable, y yo no”.

Este es el tercer retiro del diácono Gray: durante 30 años sirvió en las Fuerza Aéreas y 15 años en la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica; su familia llegó a Utah de California en 1986.

Ingresó al programa de diaconado después de haber recibido la invitación de la Hermana Maria Molina. “Tengo que agradecérselo; ella me pidió ser diácono cerca de tres veces y finalmente acepté”.