El Padre Lachica está listo para servir a su nueva comunidad

Intermountain Catholic

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HELPER – El Rev. José Nestor P. Lachica, está de regreso de su entrenamiento en Fort Jackson en Carolina del Norte, y ahora está listo para server como Pastor de la Iglesia de San Antonio de Padua en Helper y a sus ministerios.

En Fort Jackson el Padre Lachica complete el curso de liderazgo titulado ‘Chaplain Basic Officer Leadership’.

"Fui llamado a server, por lo que tuve que dejar Utah y asistir al entrenamiento por algunos meses", dijo el Padre Lachica.

Capitán de las fuerzas armadas de los Estados Unidos, el Rev. Lachica es el Capellán del batallón insignia 98, el cual opera desde Meza Arizona. Sin embargo el Padre Lachica pidió permiso a su comandante para poder servir en la Diócesis Católica de Salt Lake City.

"Le pregunté a Monseñor Fitzgerald(entonces Vicario General de la Diócesis Católica de Salt Lake City y Vicario del Clero) si podía darme una asignación después de terminar mi entrenamiento y él me dijo que ‘Sí, te daremos una asignación’", dijo el Rev. Lachica, quien fue asignado como Pastor visitante de Santa Rosa de Lima en Layton cuando arrivo por primera vez a Utah el pasado mes de octubre. Oficialmente a partir del 3 de agosto comenzarán sus actividades en Helper.

El Padre Lachica nació y creció en Fili-pinas en donde fue ordenado sacerdote por el Obispo Jesús Varela el 21 de diciembre del 2002.

Tiene un hermano y cuatro hermanas. Su llamado al sacerdocio ocurrió desde que era solo un niño.

"Desde pequeño cuando iba a Misa, le dije a mi papá yo quiero ser sacerdote. Mis padres no me creyeron pero cuando termine mi formación en el seminario se convencieron de mi vocación", dijo el Rev. Lachica.

Sus expectativas en el Condado de Carbón son servir a la gente en lo que pueda.

El Rev. Lachica habla español e inglés y con la ayuda y el apoyo del Padre Stanislaw Herba, pastor de la parroquia de Santa María de la Asunción y de Saint Lawrence en Heber,el Rev. Lachica cree solo tiene un reto.

"Mi reto es el viajar", dijo el Padre, quien tiene que manejar por una hora y fracción para celebrar las misas en las misiones.

El Reverendo Lachica está muy contento y entusiasmado con su nueva asignación. Con una gran sonrisa dijo que ya sabe lo que le dirá a su nueva comunidad acerca de él. "Solo les diré que estoy aquí para servirles y ayudarles lo más que pueda. No soy una persona perfecta. Tengo debilidades pero también fortalezas y voy a tratar de hacer todo lo posible para que mi servicio sea muy bueno en esta comunidad".