La Dedicación de la Iglesia Católica de San Francisco de Asís

Friday, Feb. 24, 2012
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El Obispo John C. Wester fue el principal celebrante durante la liturgia de dedicación de la Iglesia Católica de San Francisco de Asís. IC photo/Marie Mischel
By Laura Vallejo
Intermountain Catholic

OREM – La Iglesia Católica de San Francisco de Asís celebró su Liturgia de Dedicación el fin de semana pasado.

Cientos de feligreses se die-ron cita desde muy temprano llenando poco a poco las bancas de la Iglesia.

El Coro de Niños en Español bajo la dirección de Daniel Burciaga fueron los encargados de dar inicio a la celebración dele-itando a los asistentes con varias interpretaciones.

Mientras tanto a las afueras de la Iglesia John Sparano, Dennis Winger y James Bradley arquitectos y constructores de la Iglesia, presentarón las llaves y los planos al Reverendísimo John C. Wester, Obispo de Salt Lake City, quien después se las entregó al Padre David J. Bittmen, Pastor de la Iglesia.

A continuación la guardia de honor de los Caballeros de Colón entraron a la Iglesia flanqueando la entrada del Reverendísimo John C. Wester, Obispo de Salt Lake City así como de otros mi-nistros Litúrgicos, Sacerdotes y Diáconos.

Junto al Obispo Wester la misa fue concelebrada por el Muy Reverendo Monseñor J. Terrance Fitzgerald, Vicario Emérito de la Diócesis de Salt Lake City, por el Muy Reverendo Monseñor Colin J. Bircumshaw, Vicario General de la Diócesis Católica de Salt Lake City, por el Reverendo David J. Bittmen, Pastor de San Francisco de Asís, por el Reverendo José Rausseo, Vicario Parroquial de San Francisco de Asís, y por el Reverendo Garret Edmunds, O.F.M., antiguo Pastor de San Francisco de Asís.

"Es todo… el viaje fue muy grande, este el primer paso," dijo el Padre José Rausseo, Vicario Parroquial de la Iglesia Católica de San Francisco de Asís.

El Obispo Wester remarco que la unidad de la comunidad como una solo y su arduo trabajo en cuanto a la construcción de l a Iglesia quedará registrado como un legado para las generaciones venideras."Para muchas generaciones venideras, las personas podrán disfrutar los frutos de su trabajo, de su generosidad y sacrificio", dijo el Obispo Wester a los presentes.

Los maestros de ceremonias fueron el Diácono Lynn Johnson y el diácono Willis Basset y la asistente fue Juliana Boerio-Goates, presidenta del Comité de Construcción y Coordinadora Pastoral de la Iglesia Católica de San Francisco de Asís.

Debido al continuo crecimiento de la población católica en el 2000 la parroquia de San Francisco de Asís se mudó de Provo a Orem. La primera fase de la construcción incluyo las oficinas para funciones administrativas, el gimnasio y centro social, la cocina y salones para la educación religiosa. Fue entonces que los feligreses tuvieron que asistir a Misa durante 11 años en el gimnasio, esto hasta que se recaudaron los fondos necesarios pata la construcción de la Iglesia. El 27 de diciembre del 2011 la construcción comenzó.

"Queríamos tener un lugar para poder celebrar las Misas regularmente, sentíamos como que estábamos en un peregrinaje [de Proco a Orem, luego en le gimnasio, en el sótano…]", dijo el padre Bittmen.

El Padre Bittmen señaló que tanto el Comité de Construcción de la parroquia así como el consejo pastoral están formada tanto por miembros de la comunidad hispana como por miembros de la comunidad de anglos por lo que con el trabajo junto ambos tuvieron que ver con este logro en la Iglesia.

"Los grupos hispanos se dedicaron a vender comida mexicana después de cada Misa" dijo el Padre Bittmen, agregando que "estuvieron muy involucrados en la recaudación de fondos, realizaron varios bailes, cenas, celebraciones del 5 de Mayo".

"La comunidad en verdad trabajo muy duro y dio lo mejor, particularmente algunos de los grupos hispanos; este lugar es para ellos y para sus hijos, toda la comunidad en verdad se unió y eso es muy gratificante", dijo el Padre Bittmen.

Después de la celebración de la Liturgia entre aplausos , mucha alegría y palabras de agradecimiento los danzantes Aztecas llenaron la Iglesia con sus bailes y música.

"Para mí es algo muy bueno, trabajamos mucho para lograrlo," dijo Carlos Guerrero, parte del Consejo Parroquial de la Iglesia Católica de san Francisco Javier.

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