La diócesis da bienvenida a nuevo seminarista

Friday, Apr. 17, 2015
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Luis Uriel De Dios Hernández, el nuevo seminarista de la Diócesis Católica de Salt Lake City, se encuentra realizando sus estudios de inglás en la Universidad de Utah y ayudando en la parroquia del Sagrado Corazón en Salt Lake City. IC Foto/Laura Vallejo
By Laura Vallejo
Intermountain Catholic

SALT LAKE CITY — Cerca de un mes atrás, Luis Uriel De Dios Hernández llegó a Salt Lake City.
Originario de  Martínez de la Torre en Veracruz, México, De Dios Hernández ingresó al seminario por primera vez cuando tenía tan solo 14 años de edad.
“Era muy joven. Yo siempre había estado muy cercano a mi sacerdote – no a un cierto sacerdote sino al sacerdocio de Cristo como tal – así es que cuando me invitaron a un retiro vocacional en el seminario ni lo dudé”, dijo De Dios Hernández.
Cuando en el seminario se presentó la oportunidad de cursar allí mismo la preparatoria, De Dios Hernández se inscribió, pero poco a poco fue viendo como menos y menos estudiantes se iban saliendo hasta ser él el único en la clase.
“Así es que uno de los sacerdotes me preguntó qué es lo que quería hacer… podía seguir solo en el siguiente nivel o podía regresar a mi casa y esperar al grupo que venía detrás”, dijo De Dios Hernández.
Decidió regresar a su casa y terminar la preparatoria afuera del seminario. 
De Dios Hernández piensa que hasta ese momento no sabía realmente lo que era una vocación.
“Todos caminamos junto a Cristo, pero ¿cómo es que realmente te das cuenta de la vocación?,¿ es algo real?, ¿es el camino que se debe seguir?...realmente implica un gran discernimiento y oración”, dijo De Dios Hernández.
Fue así que comenzó a prestar más atención a como las personas se acercaban a los sacerdotes, y vio ese agradecimiento que recibían, y como las personas realmente confiaban en ellos. 
“Todo eso fue un incentivo para confirmar mi vocación”, dijo  De Dios Hernández.
El año después de haberse graduado de la preparatoria, ingreso al Semina-rio de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción para la Diócesis de Papantla Veracruz; el seminario se ubica en la ciudad de Teziutlán, Puebla.
Después de tres años de estudiar filosofía, realizo un sumario de sus estudios en el seminario en la ciudad de México. Después de haberlo presentado, pasó al siguiente nivel que es la teología.
La invitación a la Diócesis de Salt Lake City llegó después de haber enviado varios documentos a la oficina de vocaciones de la Diócesis; De Dios Hernández ya conocía al Padre Eleazar Silva, párroco del Sagrado Corazón y a Jorge Martínez, otro de lso seminaristas de la Diócesis.
También De Dios Hernández fue el chofer del Obispo Lorenzo Cárdenas, quien en el 2013 vi-sitó Utah como parte de los presentadores para el programa del diaconado permanente; a su regreso de Utah el obispo le mencionó a De Dios Hernández acerca de la necesidad de sacerdotes en Utah.
De Dios Her-nández  dijo que cuando la oficina de vocaciones de la Diócesis de Salt Lake City le preguntó porque quería ser parte de los sacerdotes de Utah.
De Dios Her-nández respondió que él considera que la Iglesia es Universal y que para él siempre ha estado muy claro que el sacerdocio es un ejercicio de servicio.
Finalmente el 5 de marzo de este año, después de haber presentado sus cartas de recomendación y de haber recibido la invitación formal, De Dios Hernández llegó a Utah lleno de emociones y alegría.
“Creí que me iba a encontrar con una iglesia en el medio de otra iglesia (los mormones) que era muy letárgica y muy limitada”, dijo De Dios Hernández, pero para su gran sorpresa dijo que se encontró con una Iglesia viva y muy vibrante. “Me encanta. Todo es muy organizado… me está gustando mucho el poder estar aquí”.
Por el momento De Dios Hernández se encuentra estudiando inglés en la Universidad de Utah.
“Estoy poniendo  mi mejor esfuerzo para aprender lo más rápido posible el inglés para así poder seguir mi camino hacia el sacerdocio”, dijo De Dios Hernández a quien le gusta el fútbol soccer, las actividades al aire libre y todo tipo de música.
“Ser seminarista es una gran responsabilidad pero al mismo tiempo es un gran honor y una gran alegría. Para mí la vida perfecta es la que tiene a Dios como base, la que tiene pasatiempos, amistades…si uno tiene a Dios  presente en su vida, si uno está con Dios, Dios está contigo y así no se tiene miedo de seguirlo”, dijo De Dios Hernández.

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