¡Saludos con la paz y amor de Cristo!
Fue muy espectacular la reunión a la que todos los fieles asistieron el domingo pasado, en celebración del Rally Eucarístico Diocesano. Nunca había sentido tanto apoyo, entusiasmo y devoción a la Eucaristía, gente y cumbre de nuestras vidas Cristianas. Realmente somos una Iglesia local viva llena de fe, de discípulos misioneros. Fue realmente enternecedor ser parte de la reunión como una sola comunidad de fe alrededor d el a Eucaristía, de los miles de personas del Pueblo de Dios con diversas culturas de todas las parroquias y misiones de la Diócesis de Salt Lake City.
Agradecemos a Dios su maravillosa bendición de una celebración de nuestra fe llena de gracia. Tales eventos requieren de una gran planeación creativa y de un arduo trabajo por parte de muchas personas. Quiero agradecer a todos los fieles que llegaron a la celebración de la Santa Misa. Me encantó ver a los padres de familia con sus hijos, juntos disfrutando el espíritu de comunidad, así como las actividades y eventos del Rally. Un agradecimiento especial al padre Cristopher Gray, quien con sus habilidades personales y entusiasmo organizaron nuestro Rally Eucarístico Diocesano junto a sus comités, a nuestro personal diocesano, y a todos los que sacrificaron su tiempo como voluntarios.
También estoy muy agradecido por el gran apoyo de todos nuestros hermanos sacerdotes, especialmente a quienes ese día dedicaron muchas horas escuchando las confesiones; a los diáconos, líderes laicos y religiosos por organizar y enviar a líderes de sus parroquias y misiones; a todos nuestros invitados que ofrecieron presentaciones- El Obispo Daniel E. Flores, José Antonio Medina, Timothy O’Malley y a Benjamín Acosta, quienes enriquecieron nuestro entendimiento de la Eucaristía- al coro y a los músicos, quienes enriquecieron nuestra Misa y procesión Eucarística, así como a los voluntarios y personal de seguridad.
El espacio en donde se realizó la Santa Misa conto con un escenario espiritual y de reverencia, Gracias también a quienes crearon el ambiente hermoso simulando a la Catedral. Por la procesión de los estandartes y a los benefactores que tan generosamente donaron los fondos que hicieron todo esto posible. Fue realmente maravilloso el ver a tantos niños, jóvenes y familias disfrutando las exposiciones educativas, así como los vénetos. Dios realmente bendijo nuestro Jubileo Eucarístico del domingo. Estoy muy agradecido.
Nuestro Rally Eucarístico Diocesano dio pie a la segunda etapa del Avivamiento Eucarístico Nacional bajo la iniciativa de la Conferencia de Obispos Católico s de los Estados Unidos. Estamos listos para un camino espiritual conforme llevamos nuestra alegre experiencia y ardor de nuestro amor por el gran Sacramento a todas nuestras parroquias y misiones a lo largo de la diócesis en Utah continuando con la renovación de nuestra fe ante la presencia real de Cristo en la Santa Eucaristía.
¡Que la bendición de Dios siga con nosotros!
El Reverendísimo Oscar A. Solis, D.D.
Obispo de Salt Lake City
Traducción: Laura Vallejo
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