Traducción: Laura Vallejo
SANDY — Desde Logan hasta St. George, de Tooele hasta Vernal, de todas las parroquias y misiones en Utah, un estimado de 10 mil católicos se reunieron el 9 de julio para juntos celebrar el Rally Eucarístico Diocesano y Misa.
“Este es realmente un día que quedara marcado en la historia de nuestra diócesis y estoy tremendamente agradecido por su presencia hoy aquí,” dijo a los presentes el muy reverendo padre Christopher Gray, persona encargada del Avivamiento Eucarístico diocesano, durante la Oración de la mañana, la cual fue el primer evento de la celebración del 9 de julio. Sus comentarios fueron en inglés y en español.
El Obispo Oscar A. Solis, guio la oración, asistido por el diácono George Reade, canciller diocesano. Los asistentes llenaron el salón, algunos inclusive bordeando las paredes del mismo conforme comenzaban la alabanza entonando ‘Somos el Cuerpo de Cristo’ tanto en inglés como en español.
“Que día tan hermoso que Dios nos ha dado para reunirnos como una comunidad de fe. Llenos de alegría y emoción por la Eucaristía, en donde encontramos y experimentamos la presencia viva- la presencia real- de Jesucristo nuestro Señor,” dijo el Obispo Solis. “Es un gran momento para todos los Católicos en el estado de Utah. Hoy celebramos la importancia de la Santa Euca-ristía como la fuente y cumbre de nuestra vida y alabanza cristiana. Celebramos lo que significa ser verdaderas personas de Eucaristía y celebramos el cómo la Eucaristía hace presente la relación que Dios tiene con cada uno de nosotros, Conforme comenzamos este día juntos, mantengamos en nuestras mentes que la Eucaristía no es solo algo que recibimos, sino algo en lo que nos convertimos. Si lo hacemos con fe, la Eucaristía nos ayuda a transformar nuestras vidas en dones de Dios para nuestros hermanos y hermanas.”
El rally incluyó a presentadores de renombre nacionales, oportunidades para el Sacramento de Confesión y Adoración del Santísimo, un rally para adolescentes y jovenes y una Zona Familiar con actividades para los niños. El día culminó con una Misa presidida por el Obispo Oscar A. Solis.
Las personas que ofrecieron presentaciones en inglés fueron el Obispo Daniel E. Flores de Brownsville, Texas, quien es el presidente del Comité de Doctrina de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos y el Dr. Timothy O’Malley, director de Educación del Instituto McGrath para la Vida Parroquial y director académico del Centro de Liturgia Notre Dame. El Obispo Flores también ofreció su presentación en español y el Dr. JoséAntonio Medina, también se dirigió a los hispanoparlantes; Medina es profesor en la Universidad de St. Thomas en Texas y en la Universidad Loyola en Los Ángeles. Todas las presentaciones estuvieron llenas.
Durante la presentación titulada ‘La Eucaristía: La Fuente de la Unidad en la Iglesia’, Medina habló sobre la importancia de la participación en la Misa, desde su comienzo hasta su término, así como de la historia de la misma.
“A principios de la historia de la Misa, quien la ce-lebraba era el padre de familia, y esta se celebraba en las casas,” dijo el Medina haciendo notar que conforme pasó el tiempo la estructura de la Iglesia y sus ministerios crecieron hasta llegar a ser “la Iglesia de hoy en día, pero nunca debemos olvidar que la Iglesia comenzó en la familia.”
Medina dijo que la comunidad es la base de la Iglesia.
A través de su presentación Medina dio algunos de los más importantes testimonios de la Escritura y de la tradición de la Iglesia, reflexionando sobre los ritos, simbolismos y palabras que se utilizan en la celebración Eucarística.
“La Eucaristía “nos une en una comunión de amor con el Padre con el Hijo y con el Espíritu Santo,” dijo Medina.
La presentación del Obispo Flores se tituló ‘Eucaristía: Participación en la obra de Jesús’ considerando “como es que Cristo comparte el acto por el que se Glorifica al Padre con nosotros y nos dice sigan adelante,” dijo el padre Gray en su presentación de la plática del Obispo.
El Obispo Flores estaba programado para presentarse en persona, pero por recomendación médica se le pidió no viajar, por lo que su presentación fue realizada a través de la plataforma Zoom.
La celebración Eucarística “es una invitación constante para entrar a la participación en la vida de Cristo,” dijo el Obispo Flores. El enfocó su plática en la caridad, ya que esta es “la clave creo, para que podamos apreciar los que es que el Señor nos brinda cuando se hace disponible y presente y activo durante la celebración Eucarística, el sacrificio Eucarístico.”
El Obispo dijo que en la Iglesia la caridad está definida como un tipo de amor particular, Cristo mostró caridad no solo a través de la Eucaristía sino a través de sus enseñanzas y con el lavado de los pies de sus discípulos.
El deseo del Reino de Dios y el deseo a la Santidad, “es el objeto de la predicación de Cristo; también es objeto de Sus milagros, el objeto de Sus parábolas,” dijo el Obispo.
Cuando las personas escuchan las enseñanzas de Cristo, deben de escucharlas para “saber ¿qué es a lo que Dios quiere llevarme? Ya que este es un aspecto de la caridad,” dijo el Obispo Flores, ya que la caridad “nos forma para buscar lo que Cristo busca, a desear lo que Cristo desea. Es un mensaje transformador; no simplemente una doctrina que permite el entendimiento de ciertas cosas… También es un llamado al movimiento; esto es a ser movidos hacia el deseo de un reino y de una vida en el reino.”
El Obispo Flores enfatizó que “el acto por el que fuimos salvados es un acto en el que Cristo se dio al Padre. La narrativa de la Eucaristía es una narrativa que habla al padre; no a nosotros, se habla por nosotros hacia el Padre.”
Comer el Cuerpo y beber la Sangre de Cristo debe de llevar al pueblo hacia Dios y hacia el servicio a los demás, “ o por lo menos lo debería de ser… La Iglesia tiene le res-ponsabilidad de vivir la caridad de Cristo como el Buen Samaritano, de manera como el padre que busca reconciliar a sus hijos en la parábola del Hijo Pródigo,” dijo el Obispo.
O’Malley habló sobre “el ser personas de la Eucaristía’ llenando su presentación con simpáticas anécdotas, O’Malley exploró el cómo la Eucaristía moldea “la Iglesia de una manera de vida que es un don para todos los que se encuentran con Cristo en la Iglesia…La tarea del avivamiento Eucarístico, me gustaría sugerir, es adoptar una cultura Eucarística, en donde la Iglesia se transforma en más de lo que la Iglesia está llamada a ser: una comunión de amor que mantiene viva la memoria de la salvación ofrecida por Cristo, fortaleciéndonos para vivir esta vida, esta vida eucarística, en el mundo.”
Animando a su audiencia a hacer una práctica de la Adoración Eucarística, ya que esta “nos lleva a cada día ver con unos ojos nuevos y transformados. Aprender a ver Su amor nos invita a ver Su amor en todos. En el hambriento en el sediento, en el inmigrante en el encarcelado, en el no nato en los vientres maternos y en sus mamás- allí esta. Cristo esta siempre en la Eucaristía; así es que podemos aprender es a ver eso.”
También durante el Rally se ofreció una presentación del USCCB sobre las Guías para la Celebración de los Sacramentos para las personas con discapacidades.”
El Rally Eucarístico Diocesano y Misa fue el evento final de la dase diocesana del Avivamiento Eucarístico Nacional. La siguiente fase es la fase parroquial el próximo año se celebrará un rally nacional el cual marcará la culminación del esfuerzo. Para mayores informes visite: www.eucharisticrevival.org.
Stay Connected With Us