En cuanto al Coronavirus, la Diócesis de Salt Lake City sigue vigilando de cerca la situación con el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC) y los Servicios de Salud de Utah. Hasta la fecha ninguna agencia ha emitido directivas específicas para nuestra región.
La diócesis está preparada para implementar las precauciones de salud en caso de que se necesitase. El Obispo Oscar A. Solis emitió un Memorando Diocesano a todos los Sacerdotes y Directores de Escuelas Católicas sobre las medidas de precaución y las pautas a seguir en caso de que el CDC y/o los Servicios de Salud de Utah nos proporcionen directivas claras para implementar las precauciones.
Hasta que las medidas sean llamadas a acción, la Comunión seguirá siendo distribuida de acuerdo a la práctica diocesana.
Mientras tanto, los párrocos pueden dar a su congregación y a los servidores de la Iglesia algunas instrucciones de sentido común durante este tiempo:
1. Siempre lávense las manos, especialmente los ministros que sirven en la Iglesia durante la Misa y otras celebraciones litúrgicas
2. Cubrir la boca al estornudar
3. Evite el contacto o el contacto especialmente con alguien que esté enfermo, que tenga frío o que le gotee la nariz.
4. Si no se siente bien o enfermo, quédese en casa y evite estar en público
5. Consulte a su médico cuando sea necesario
Nuestra postura en la Diócesis requiere prudencia, cautela y preparación. Queremos estar preparados si hay que tomar precauciones, pero también queremos tener cuidado de no crear un ambiente de pánico en nuestra comunidad. Gracias por su amable atención.
Para información actualizada del coronavirus en Utah, visite https://health.utah.gov/coronavirus.
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