OREM – Hace más de un año la Diócesis Católica de Salt Lake City tuvo la alegría de ser testigo de la ordenación de varios diáconos permanentes. Entre ellos el Diácono Moisés Ruiz, el cual realiza su servicio en la iglesia católica de San Francisco de Asis en Orem. "Para mí ha sido un año de mucho que aprender, ha sido muy bueno, muchas cosas positivas que se han hecho y mucho trabajo", señalo Ruiz. El diácono Ruiz ayuda en la predicación de las misas de los domingos y cada tres semanas también en las misas de los sábados. Además ayuda en el RICA, a las familias a los jóvenes y ha realizado bautizos, quinceañeras y una confirmación. "Ayudo a los jóvenes en los deportes", dijo Ruiz agregando que es importante ayudar y dar consejos a las familias. El llamado de Ruiz surgió desde que estaba chico pues él sentía admiración y le llamaban mucho la atención los sacerdotes, además de que su abuelo siempre había querido que alguno de sus nietos fuera sa-cerdote. "Fuimos ordenados, pero Diáconos permanentes y eso es algo que él quería y yo espero que algún día alguno de mis hijos o nietos salga sacerdote", señaló Ruiz. La familia de Ruiz está compuesta por tres mujeres y dos hombres además de su esposa Juanita quien ha ayudado y apoyado a Ruiz antes y después de su ordenación, ya que a él le cuesta un poco de trabajo el idio-ma inglés. "Ella cada día me apoya más ella siempre me ayuda con el inglés.Tengo la dicha de que me ayuda y eso es mucho para mí", enfatizó Ruiz. El diácono trabaja día a día inculcando en su familia las vocaciones ya que considera muy importante que la fe pase de generación en generación. De acuerdo a Ruiz en la comunidad de Orem existen varias necesidades ya que la parroquia es muy grande y gracias a Dios existen muchos ministerios y muchos laicos comprometidos lo que a él le produce una enorme satisfacción. "Yo sólo trato de poner mi granito de arena", señaló Ruiz. Sus objetivos radican en trabajar más y seguir estudiando para poder realizar esto ya que como él lo dice "cuando escogí este diaconado fue para dar y servir ya que queremos dar en todo lo que podamos". Ruiz se mantiene todo el día activo ya que su diaconado también lo aplica en su trabajo regular pues el trabaja para un sindicato de la construcción en donde apoya a los trabajadores en cuanto a la justicia social. "Cuando me muera entonces ya pararé", señaló Ruiz con una sonrisa.
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