El pueblo se da cuenta de sacerdotes apegados al dinero, dice el Papa

Friday, Nov. 25, 2016

Por Cindy Wooden

Catholic News Service

CIUDAD DEL VATICANO (CNS) — Los católicos pueden perdonar muchas debilidades de un sacerdote, pero no un apego exagerado al dinero o el maltrato de los feligreses, dijo el papa a 160 sacerdotes que trabajan en nunciaturas del Vaticano en todo el mundo.

El pueblo de Dios se da cuenta de los sacerdotes que sirven al “dios del dinero” más que a Dios el padre, dijo el papa a los sacerdotes el 18 de noviembre.

El papa Francisco se enfocó en la lectura del Evangelio según San Lucas cuando Jesús expulsa a los mercaderes del templo.

En la lectura, Jesús acusa a los mercaderes de convertir la casa del Señor en una “guarida de ladrones”.

“El Señor nos hace comprender dónde está la semilla del anticristo, la semilla del enemigo, la semilla que arruina su reino” – el apego al dinero, dijo el papa.

“Un corazón atado al dinero es un corazón idólatra”, dijo.

Una iglesia, como el templo, se supone que es una casa de oración, un lugar para encontrar al Dios del amor, dijo el papa. Pero el “señor-dinero” constantemente trata de entrar incluso allí.

Los comerciantes y los mercaderes no fueron los únicos que se acomodaron en el templo como en su propia casa, dijo el papa Francisco. “¿Quién alquiló los lugares, eh? Los sacerdotes. Los sacerdotes alquilaron aquellos puestos y el dinero entró” en la casa de Dios.

El diablo tienta a la gente, incluso a los sacerdotes, a hacer del dinero un ídolo y los lleva a una vida “sin felicidad, sin la alegría de servir al verdadero Señor, que es el único capaz de darnos la verdadera alegría”.

“Es una elección personal”, el papa dijo a los sacerdotes. “¿Cómo es su actitud con el dinero? ¿Están apegados al dinero?”

Los católicos tienen “una gran intuición” y pueden canonizar y condenar a los sacerdotes, y perdonan “tantas debilidades, tantos pecados a los sacerdotes; pero hay dos que no puede perdonar: el apego al dinero, cuando ve al sacerdote apegado al dinero, no perdona eso, o el maltrato a la gente, cuando el sacerdote maltrata a los fieles: esto el pueblo de Dios no puede digerirlo”, dijo.

Pueden perdonar otras debilidades, otros pecados, diciendo “pero pobre hombre, está solo… y trata de justificar” su comportamiento.

El papa Francisco dijo a los miembros de las nunciaturas mundiales que “es triste ver a un sacerdote llegar al final de su vida - en agonía, en coma - y sus “sobrinos como buitres allí, viendo qué pueden aferrar”.

El papa dijo que sacerdotes deben tener “dinero suficiente, lo que tiene un trabajador honrado, el ahorro suficiente, lo que tienen un trabajador honrado. Pero el interés no es lícito, esto es una idolatría”.