La gratitud es el tema que engloba la Corresponsabilidad o Stewardship

Friday, Oct. 07, 2011
La gratitud es el tema  que engloba la Corresponsabilidad  o Stewardship + Enlarge
By The Most Rev. John C. Wester
Bishop of Salt Lake City

Un muy querido amigo mío, El Padre Gene Konkel, SS, contaba la historia de un contemporáneo que conoció en Menlo Park, California. Este caballero después de haber sufrido una embolia, trabajaba en el estacionamiento de un banco local. Este trabajo de medio tiempo le ofreció algo que hacer durante el día y le ofreció la oportunidad de continuar relacionándose con las personas, lo cual extrañaba mucho ya que tuvo que renunciar a su antiguo trabajo. Cada vez que el Padre Gene veía a su amigo, este lo saludaba con un "Como estas Bob? Y Bob siempre contestaba "Agradecido Padre. Estoy agradecido". Estoy seguro que muchos de nosotros concordamos en que una tragedia como una embolia tiene que suceder para que recordemos todo lo que la vida nos brinda y que muchas veces damos por sentado todos esos dones. La embolia de Bob le dio la ventaja de poder darse cuenta de todo lo que Dios le da cada día. Su gratitud hacia los que tenía rebaso las dificultades sufridas por su embolia.

La gratitud es el tema que engloba la corresponsabilidad. El tomar la Corres-ponsabilidad como una manera de vida significa ser y estar aun más agradecidos por todo lo que somos y tenemos. De hecho, la única respuesta que podemos darle a Dios por los dones recibidos es una respuesta de amor, una muestra de gratitud. Todo lo que somos y tenemos viene de Dios. Nosotros no podemos crear nada. Trate de nombrar algo que sea totalmente de su creación. Esto simplemente no puede ser. Es verdad que podemos trabajar duro con los dones que se nos han dado; podemos aplicarnos y utilizar los talentos que tenemos para lograr grandes metas. Sin embargo todo lo que hacemos y logramos siempre nos lleva a Dios, quien es el dador de todos los dones. Aunque algunas veces podemos llegar a pensar que somos ‘los dueños de nuestro destino’ quienes ‘logramos lo que te-nemos por nosotros mismos’ en realidad somos como pequeños niños quienes sus amorosos padres son quienes los cuidan y ven por ellos, frecuente-mente sin que estos se den cuenta. Conforme tomemos a la Co-rresponsabilidad como una manera de vida, en su espiritualidad, estaremos más agradeci-dos con nuestro amoroso y espléndido Dios.

Una de las mejores maneras de expresar nuestra gratitud es fortalecer nuestro a mor a Dios. Los dones que Dios nos da nos acercan a El. No debemos acaparar o dejar de hacer cosas con los dones que Dios nos da, debemos estar conscientes de que somos llamados a usarlos para que estos nos lleven hacia Dios, el dados de los dones. Recuerden uno de los leprosos en el salmo de Lucas el cual se dio cuenta del don de curación que había recibido. Lucas nos dice ‘Entonces uno de ellos, al ver que había sido sanado, se volvió glorificando a Dios en alta voz…’(Lucas 17:15). Aquí vemos la Corresponsabilidad!, el leproso dándose cuenta del don recibido fue dirigido hacia Dios, dándole sus alabanzas, las cuales son otra forma de gratitud. Ya que Dios es todo para nosotros, debemos tratar sus dones con cuidado. Mientras que estos dones pueden tener sus propias bendiciones, su verdadera bendición viene del hecho que estos simbolizan nuestra re-lación con Dios. Pien-sen, por ejemplo, en un anillo de matrimonio: su verdadero significado viene del amor del esposo y de la esposa, simbolizado por la argolla.

Otra forma de expresar nuestra gratitud seguir el ejemplo del dador de los dones. Agradecemos a Dios haciendo por los otros lo que Dios ha hecho por nosotros. Mientras compartimos los dones con generosidad y alegría con los otros, estamos imitando lo que Dios hizo al darnos la mayor forma de alabanza posible. Esta alabanza o agradecimiento, es el corazón de lo que significa ser cristiano al compartir libremente con los otros. Podrían decir que este es un proceso por el cual le regresamos los dones a Dios permitiendo a nuestros hermanos y hermanas en Cristo adelantarse en su camino a Dios. Es así como los dones que Dios nos da se multiplican mientras más y más personas se benefician de estos y Dios recibe las alabanzas.

Existe un interesante punto en este proceso de expresar nuestra gratitud a Dios al compartir los dones con otras personas: entre más les demos a los otros, más lugar habrá para que Dios nos de más dones.

Esto nos permitirá dar más generosamente lo que significa que estaremos listos para recibir más dones. Este proceso es inagotable ya que los dones de Dios no conocen límites y su misericordia y amor esta más allá de lo que nos podemos imaginar. Recuerden la multiplicación d ellos panes y pescados, que se encuentran en los cuatro evangelios.

Los discípulos estaban atónitos no solo ante el hecho de que todos pudieran co-

mer de tan solo unos pocos panes y un par de pescados sino de que sobrara comida. Los dones de Dios nunca se terminan, no importa cuánto los compartamos, la ge-

nerosidad de Dios no tiene límites. Como una amiga, la Hermana Rosemary Everett SNJM acostumbra decir ‘es más de Dios’.

Estas son buenas noticias para todos porque significa que siempre habrá suficiente, sin importar cuánto necesitemos, siempre tendremos suficiente. Este es un misterio que nos sirve para estar más agradecidos con un Dios tan amoroso y dador.

Conforme nos preparamos para la corresponsabilidad como una forma de vida en nuestra Diócesis los animo a que pasemos tiempo contemplando los maravillosos dones que Dios nos ha dado. Se que no es fácil para todos ya que algunos cargan cruces muy pesadas. Sin embargo aún en esos casos Dios da aún más por lo que estar agradecidos. La próxima vez que alguien les pregunte como están res-pondan "Agradecidos, gracias y usted?" verá como se alegrará de haber hecho esto como también se alegrara nuestro Dios dador de todos los dones.

For questions, comments or to report inaccuracies on the website, please CLICK HERE.
© Copyright 2025 The Diocese of Salt Lake City. All rights reserved.