La Hna. Carmelita Margaret Mary: ‘Una fiel discípula de Cristo’

Friday, Sep. 05, 2025

Traduccion: Laura Vallejo

SALT LAKE CITY — La Hna. Carmelita Margaret Mary del Sagrado Corazón de Jesús quien falleció el 27 de agosto fue recordada como  ‘Una fiel discípula de Cristo’ por el Obispo Oscar A. Solis, quien presidío su Misa funeraria el 30 de agosto en la capilla del monasterio Carmelita.

La Hna. Margaret Mary, una de las miembros fundadoras del monasterio Carmel of the Immaculate Heart of Mary en Salt Lake City, estaba en su 80avo año de vida religiosa.

El 28 de octubre de 1945 a los 18 años de edad ingresó al monasterio de las Carmelitas en Alhambra California. A los 25 años de edad ella junto a un grupo de monjas del monasterio llegaron a Salt Lake City por la invitación del Reverendísimo Duane G. Hunt, quinto Obispo de Salt Lake City. “Aquí ella fielmente sirvió a la comunidad de muchas maneras, tales como de sacristán, sub-priora, y priora,” se lee en su obituario. “Ella amó a la Santa Madre Teresa y su gran devoción al Sagrado Corazón de Jesús y el Inmaculado Corazón de María y por supuesto a su santa patrona San Margaret Mary Alacoque. Su gran sello fue el ofrecer su oración intercesora por la Iglesia Católica en Utah como monja Carmelita de claustro ayudando a prender el fuego de la fe mediante la construcción de este Carmel en Utah junto a sus compañeras Carmelitas. Como monja Carmelita la Hna. sabía que su vida era dura, pero que todo era a nombre de Dios.”

Concelebrando la Misa funeraria estuvieron el padre  Sebastian Chacko, en residencia en la parroquia de Saint Francis Xavier; el padre Michael Augustine Amabisco, OP, capellán de las escuelas del Centro Católico Skaggs y monseñor Joseph M. Mayo y el padre Martin Diaz, ambos sacerdotes diocesanos jubilados. El diácono Lynn John son asistió la celebración.

Durante su homilía el Obispo Solis le pidió a los asistentes agradecer a Dios por la bendición de la vida de la Hna. Margaret Mary, por el don de la fe y de la vida eterna.

El Obispo Solis dijo que la Hna. aceptó la invitación de Cristo a seguirlo y “totalmente se rindió ante Dios” al ingresar a la orden de las Carmelitas…”esto le permitió a Dios utilizarla como un instrumento pata llevar a cabo su divino plan de salvación.”

Ella “vivió sus votos con mucha fidelidad. Compromiso y alegría,” dijo el Obispo Solis. “Ella dio su vida a la oración, reflexión, buenas obras para ustedes y para mí y para mucho más ofreciendo todo por Jesús a través del Inmaculado Corazón de Maria.”

Si ella pidiese hablarle a los presentes en su general “creo que nos recordaría que la vida es un don precioso de Dios” dijo el Obispo. “La vida se nos confía por un breve tiempo y de ahí regresamos a Dios.”

Aunque tristes por la súbita muerte de la Hna. “una monja Carmelita que dio y dedico su vida en oración, amor sacrificio y servicio de Dios, de la Iglesia y por nosotros el Pueblo de Dios en Utah… nuestra fe en Dios nos brinda en confort y consuelo, sabiendo que el amor de Cristo es el amor que inspiró y motivó a la Hna. Margaret” dijo el Obispo.

Al final de su homilía el Obispo Solis se dirigió  a las Carmelitas diciéndoles que el hablaba a nombre del clero y del Pueblo de  Dios en Utah conforme extendió sus simpatías por su pérdida.

La Misa concluyó con música de gaitas interpretando Amazing Grace conforme el ataúd era cargado fuera de la capilla. Las monjas desde la capilla se unieron interpretando Salve Regina.

Durante la vigilia la noche anterior de la Misa, el padre Andre Sicard, vicario pa-rroquial de la Catedral de la Magdalena también agradeció  “a Dios por su vida, por sus cerca de 80 años de vida consagrada un testimonio de la fe que ella tuvo en Dios, espero podamos aprender de su ejemplo conforme oramos para que Dios le de la bienvenida al paraíso.”

Entre los asistentes a la vigilia estuvo el padre  Adrian Komar, párroco de la Iglesia de Saint Thomas More.

La Hna. Margaret Mary nació bajo el nombre de Roseanne Margaret Miller el 14 Octubre de 1927 en  Omaha, Nebraska. Tuvo un hermano mayor y una hermana menor.

A solo cinco días de su nacimiento, su mamá y su hermano se embarcaron en un viaje a Los Ángeles en donde su papá se había ido a preparar un hogar para ellos. Dos años después la familia se mudó a Glendale. 

A los 72 años de edad la salud de la Hna.  Margaret Mary’ comenzó a declinar, pero el buen Señor la bendijo con una mente ágil hasta el último día de su vida, que fue dos meses antes de cumplir 98 años de edad. Falleció de una complicación por un infarto cerebral que sufrió el 9 de julio de este año.

Le sobreviven sus sobrinos, Richard y Dennis Kryzer de California; y su familia religiosa.

Su entierro fue en el Cementerio Católico Mount Calvary.