Novicia Carmelita reflexional sobre el amor de Dios

Friday, Nov. 05, 2021
Novicia Carmelita reflexional sobre el amor de Dios
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Las Hermanas Carmelitas viven en claustro. Todos los días parte de su día oran por las peticiones de todo el mundo. El Monasterio Mount Carmel se encuentra en Holladay, Utah.
By Special to the Intermountain Catholic

Traducción: Laura Vallejo

(Nota editorial: en honor a la Semana Nacional de las Vocaciones, la cual este año se celebra el 7 al 13 de noviembre, el Intermountain Catholic le pidió a las Hnas. del Convento Carmel of the Immaculate Heart of Mary en Salt Lake City, enviar este artículo sobre su llamado a la vida religiosa. La siguiente fue su respuesta, el nombre de las Hnas. no es publicado a solicitud de las Carmelitas)

“Heme aquí, Señor.” Dijo una de la novicias al entrar por primera vez a nuestro monasterio de claustro. Arrodi-llándose ante el Santísimo, la invadió un sentido de profunda paz. Así ella descubrió su vocación a la vida religiosa.

Cualquier vocación comienza con una relación personal con Dios. Como una persona puede saber si Dios lo llama, entre tantos llamados, a una misión especial? Fios tiene un plan para cada persona que ha creado. Este plan incluye la salvación de esa persona y de muchas almas conectadas a esa persona. Como colaboradores en ese plan, debemos cultivar nuestra relación con Dios. Dos Hermanas  en el noviciado en el Monasterio Carmel of the Immaculate Heart of Mary, comparten como desde que llegaron al monasterio, han experimentado un entendimiento más profundo sobre el amor de Dios.

Nuestra primera novicia declaró, “Santificado sea Dios y todo sus santos!” Desde que la Hna. ingresó a la Iglesia Católica en el 2015, ha experimentado varias bendiciones, pero una de las más grandes ha sido el aprender sobre los santos. En el monasterio las bendiciones han florecido. Nuestra información incluye varias de las lecturas relacionadas con nuestras maravillosas santas carmelitas- ambas biografías, así como de sus palabras. La Hna. ha disfrutado indagar en las vidas de los santos, lo cual la ha transformado su entendimiento en Dios.

Por ejemplo, poco después de que la Hna. entró al monasterio, ella leyó la biografía de Santa Teresa de Lisieux. Su corazón se enterneció por la descripción del autor de la batalla de Santa Teresa contra la tuberculosis. A pesar del dolor insoportable, debilidad y batallas constantes para comer y respirar, Santa Teresa permaneció alegre y completamente enfocada en Dios.

Después de leer el libro, la Hna. leyó la colección de cartas que Santa Teresa escribió durante sus últimos meses de vida. Saber lo frágil que la Santa fue en este tiempo, la Hna. se impactó al saber que Santa Teresa escribió todo- además de que había mucho cariño y sensibilidad en las cartas, estas hacen que verdaderamente se vaya hacia Dios. Esto es solo un ejemplo.

Con la lectura de nuestra fundadora Santa Teresa de Ávila, la Hna se sorprendió por la energía inagotable de Santa Teresa y por su genio para la organización.

Al leer los trabajos de Santa Teresa, la Hna. soltó una carcajada. El cariño y humor son tan reales como si ella estuviese sentada con nosotros en el monasterio. Al leer sobre San Juan de la Cruz, la Hna. se sintió movida por la manera en que él se dio a sí mismo para  guiar a otros en sus caminos espirituales. Al leer los trabajos de San Juan, la Hna sintió un amor infinito.

La Hna. creció em una familia episcopal. Recuerda que las enseñanzas de la Iglesia Episcopal acerca de la comunión de  los santos, pero recuerda que los miembros de esa Iglesia no hablaban mucho de ellos. Ellos asumían que los santos eran personas ordinarias buenas como ellos. Los santos trabajaban duro, trataban de hacer lo correcto e iban a la Iglesia todos los domingos , ¿correcto? ¿Qué más podrían hacer?

En el monasterio la Hna esta creciendo en su entendimiento de que los santos son mucho más que solo una persona ordinaria yendo a la iglesia.

Por supuesto el ir a la Iglesia y el tratar de hacer lo correcto es un comienzo maravilloso. Pero, con la ayuda de Dios, los santos fueron mas allá de solo  una  virtud, lo que la Iglesia conoce como “una virtud heroica’. Y conforme su formación continua la Hna. obtiene una visión más clara de  Dios quien hace que las vidas extraordinarias sean posibles. Ella sabe Dios nos ama mas – que Él nos llama a hacer más -Él nos da mas ayuda qe lo que cualquiera se pudiese imaginar o pedir. Esto es porque Dios nos ama mucho y ansía que seamos parte de Su plan.

Nuestra novicia que se encuentra en su tercer año, quien el año pasado realizó sus votos temporales, todavía ora a diario para conocer a Dios tal y cual Él es y para amarlo más.

Fue solo Dios quien condujo a la Hna. hacia Él, quien la trajo al monasterio. Dios se ha convertido en su mejor amigo, su ‘más uno’ en los años anteriores a su ingreso al monasterio.

Muchos de sus amigos se estaban casando y comenzando sus vidas con sus familias. Aunque ella ya tenía una vida propia como miembro activa de su parroquia involucrada en varios ministerio, una parte de ella se preguntaba “Señor, ¿esto es lo que quieres de mí?’ Poco a poco ella comenzó a dejar de lado lo que quería para así poder buscar lo que Dios quería, y solo así ella sintió que verdaderamente lo podría ver al final de sus días. Ella sabia que Él la llamaba lleno de amor. Que su vocación era un regalo de amor para ella, pero también para las demás personas. Ella cree que ella es un instrumento en las manos de Dios para Su plan de salvación. Este amor la trajo al monasterio.

Por supuesto ella se sintió bienvenida por la comunidad y espera ser parte de esta familia.

Pero no todas las familias son perfectas, ninguna comunidad es siempre ideal. El llegar al monasterio no es un escape; la Hna. todavía se enfrenta a las mismas inseguridades y retos por sus fallas y sus conexiones te-rrenales. Para ella no es siempre fácil ver como Dios esta trabajando en su alma y en su vida. Algunas veces Él parece misteriosamente distante permitiéndole pasar por una serie de retos, pero aun así esos retos son purificadores y Dios le da a la Hna. la gracia para salir adelante.

 La Hna. se ha dado cuenta que Su amor es tan profundo que Él usa todos los medios para hacerla santa y aun así Él sabe que tanto ella puede manejar. Entonces Él va a ella y la conforta, con una palabra cariñosa, con un inesperado acto de caridad, a través de los regalos de los muchos amigos de nuestra comunidad.

Ella sabe que Dios siempre está presente.

Al final del día, la Hna. mira el tabernáculo en donde Jesús está presente en el Santísimo y se recuerda que ella está aquí por Él. Ella lego porque quería cumplir Su voluntad, no la suya. Así como Él vino a la tierra para hacer la voluntad de Su padre.

De esa manera, Jesús le enseña cada día lo que el amor realmente significa, lo que es responder con amor y por amor.  Él es uno con ella. Eso no ha cambiado, sino que se ha intensificado.

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