Seminarista es ordenado como diácono

IC Foto/Marie Mischel

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Traducción: Laura Vallejo

SALT LAKE CITY — El 14 de mayo la Diócesis Católica de Salt Lake City celebró el Rito de Ordenación al diaconado en la Catedral de la Magdalena. El Obispo Solis presidió la Misa. Concelebrando estuvieron Monseñor Colin F. Bircumshaw, vicario general; Monseñor J. Terrence Fitzgerald, vicario general emérito; el  Rev. Martin Diaz, rector de la Catedral; el padre Joseph Delka, director diocesano de vocaciones así como varios sacerdotes diocesanos. Los diáconos George Reade, Scott Dodge y John Kranz fueron los diáconos para la Misa en la cual el Rev. Mr. Tristán Dillon fue ordenado como diácono. Los Caballeros de Colón de Utah rindieron una guardia de Honor.

Conforme los ministros de la Misa procedieron hacia la Catedral, el diácono Dillon se sentó en una silla colocada al frente del altar.

“La Iglesia de Salt Lake City se alegra de manera particular en la celebración del Sacramento de las Santas Ordenes conforme damos la bienvenida a Tristan Dillon a la orden del diaconado,” dijo el Obispo Solis al comienzo de la celebración.

El Obispo explicó que los diáconos realizan el trabajo de la liturgia, de la proclamación de la Palabra, de los actos de caridad, y procedió a orar para que el nuevo diácono sea “efectivo en su acción, gentil en su ministerio y contante en oración.”

Después de la lectura del Evangelio, se realizó la Llamada del Candidato, durante la cual el diácono Dillon fue llamado al frente del Obispo, quien dijo “confiando en la ayuda del Señor Dios y de Jesucristo nuestro Salvador, escogemos a Tristan , nuestro hermano, para la Orden del Diaconado.”

Durante su homilía el Obispo agradeció a Dios, “por este gran don para nuestra diócesis.” El Obispo también agradeció al nuevo diacono “por aceptar el llamado al ministerio,” expresándole su gratitud a la familia de Dillon, quienes estuvieron presentes en la celebración.

“La orden de Diácono es un componente importante de la misión de nuestra Iglesia,” ya que los diáconos trabajan hombro con hombro con el Obispo y diócesis en el servicio de las personas en la diócesis, fijo el Obispo.

“Hoy por la gracia del Espíritu Santo… Tristán está siendo consagrado a la vida de servicio de nuestra Iglesia, para ser un siervo de Cristo para todos a través del ministerio de la palabra, del altar y de la caridad.”

Hablándole al diácono Dillon, el Obispo le dijo que con el profeta Jeremías en la Primer lectura (Jer 1:4-9) “Dios te ha llamado , te ha elegido, y te ha enviado para una misión, para ir y hablar en su nombre.”

El Obispo dijo que la segunda lectura (Hechos 8:26-40), la historia del bautismo del etíope, fue un ejemplo de como el nuevo diácono debe usar el Evangelio para evangelizar y enseñar a los demás para que se encuentren con Dios, “así es que te aconsejo predicar la Palabra de Dios y no la tuya, ser fiel al magisterio de la Iglesia y proclamar la verdad con alegría y entusiasmo, sin reservaciones ni compromisos.”

La lectura del Evangelio (Jn 12:24-26) nos brinda “una clara perspectiva del ministerio Cristiano,” dijo el Obispo. Ser un discípulo de Cristo, “involucra el sacrificio, de morir y de darse siempre por el bien de los demás para así poder dar frutos.”

Al término de su homilía el Obispo Solis dijo “que guíes a muchos hacia el encuentro de Dios en sus vidas, ayudando a la construcción de un mundo mejor, y esta-bleciendo el reino de amor, justicia y paz de Dios.”

Después de la homilía, el nuevo diácono se postró enfrente del altar mientras que la Letanía de la Suplica era cantada. El Rito concluyó con la Oración de la ordenación. Cuando el diácono Dillon recibió sus vestiduras como diácono, el Obispo Solis le presento el Evangelio diciéndole, “Tristán recibe el Evangelio de Cristo, cuyo mensajero eres. Cree en lo que lees, enseña lo que crees y practica lo que enseñas.”