Católicos presentes en la Marcha por la Vida

IC Foto/Linda Petersen

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Cerca de 300 Católicos se unieron a otras personas en el Capitolio de Utah para participar en la Marcha anual Por la Vida y en el Rally patrocinados por ProLife Utah.

Traducción: Laura Vallejo

SALT LAKE CITY — El 20 de enero cerca de 300 Católicos se unieron a otras personas en el Capitolio de Utah  para participar en la Marcha anual Por la Vida y en el Rally patrocinados por ProLife Utah.  

De las cerca de 1,200 personas que se reunieron para el evento, los católicos fueron el grupo con mayor representación entre los grupos que se presentaron para defender a los no natos y a las madres en el estado.

Antes del Rally el Obispo Oscar A. Solis guió a los fieles en la recitación del Rosario. Católicos de muchas parroquias, organizaciones y escuelas llenaron la plaza uniéndose en oración.

“Sé que esta marcha es muy importante para concien-tizar a las personas sobre el valor de la vida humana,” dijo el Obispo a los presentes, “pero... no es la marcha, no son las pancartas lo que transforman los corazones, mentes y vidas, es a través de la gracia de Dios. Así es que oremos; siempre oremos, todos los días oremos, todas las semanas, para recordar que el aborto es un mal. Es un pecado que debe de ser detenido. Solo se puede detener a través del poder de la gracia de Dios, no por nosotros mismos.”

Durante el rally la presidenta de Pro Life Utah Mary Taylor se dirigió a los asistentes diciendo que a pesar de que el Roe vs Wade fue volcado en junio del 2022, ya que la ley estatal hace que el aborto elegido sea ilegal está aún en la corte, el aborto es aún disponible ‘ sin ningún término a la vista’.”

Merrilee Boyack, directora de desarrollo de ProLife Utah dijo que desde el mes de junio del 2022, más de 4,800 abortos se han realizado en Utah, Pero aún hay esperanza, les dijo a los asistentes agregando que  existe un nuevo programa ProLife el cual este año ya ha salvado la vida de 14 bebes en el vientre.

Entre los asistentes a la marcha estuvo Andrew Rakowski feligrés de la parroquia de St. John the Baptist y su esposa Andrea a quienes acompañaron sus hijos Theodore de 7 años de edad, Genevive de cinco años de edad y Cora de seis meses de edad.

“La vida es un tema muy importante y esas inocentes vidas  aún no cuentan con derechos,” dijo Rakowski. “Hoy estamos aquí en familia.”

Carol Rushton, también feligrés de  St. John the Baptist  dijo que participó en la marcha “para apoyar a quienes eligen la vida y tiene una maravillosa vida siguiendo la voluntad de Dios... Todos tienen una voz para expresar lo que desean y si las personas no se ponen de pie por sus creencias, a veces no caminamos como deberíamos de caminar.”

Shawn Combs acudió a la marcha como representante del consejo de los Caballeros de Colón de la parroquia  Holy Family.

“Creo que el aborto no debería de ser usado como una forma de control de natalidad,” dijo. “Creo que debemos de mantener vivos a los bebés.”

Los no natos, “son inocentes y necesitamos defen-derlos, “ dijo Rachel Low, de 15 años de edad quien también participó en la marcha. “Ellos no tienen voz propia y necesitamos ser su voz.”

En la Diócesis de Salt Lake City los ministerios de Respeto por la vida de varias parroquias trabajan apo-yando a los no natos y a sus mamás a través de rallies de oración en las clínicas Planned Parenthood y el Centro de Recursos para embarazos, existen los proyectos Martha’s Closet de CCS y el Proyecto St. Martha’s Baby, los cuales brindan canastas con suministros para los recién nacidos en necesidad.