Comité se enfoca en el mejoramiento de la Liturgía en la Diócesis
Traducción: Laura Vallejo
SALT LAKE CITY — El deseo de crear liturgias vibrantes hizo que más de 30 personas de 20 parroquias de la Diócesis de Salt Lake City se reunieran en el centro pastoral del 2 de marzo para una reunión de 4 horas.
La Liturgia de la Misa, “es el corazón y alma de lo que somos,” dijo el Obispo Oscar A. Solis durante sus comentarios en la reunión. Sin embargo, el Obispo dijo que aunque “todos deberían estar alegres al ir a Misa a encontrarse con la presencia de Dios,” asegurándose de que la alabanza invita, levanta, inspira, reverente y alegremente implica varios componentes.
Estos componentes incluyen una buena música y un ambiente de bienvenida así como ministros bien entrenados, dijo el Obispo notando que “un hermoso concepto del Vaticano II” es que “la Liturgia es el trabajo del Pueblo de Dios,” y cada miembro de la congregación tiene un papel en la misma.
El Obispo dijo que uno de los papeles es la hospitalidad. “Cada uno forma una parte importante en el tono que toma el ambiente” para la alabanza.
El Obispo compartió que algunas de las preguntas críticas con las que se enfrenta la Iglesia local son que es lo que se puede hacer para que las personas regresen a la Misa y el como albergar un sentido de comunidad y un sentido de la presencia de Dios.
La Misa debe de ser una forma vibrante de alabanza que invita e inspira a que las personas “vengan y celebren con nosotros como una comunidad de fe,” dijo el Obispo.
El crear ese tipo de liturgia fue el enfoque de la reu-nión de la Comisión Litúrgica diocesana del 2 de marzo. El presentador fue el muy reverendo Rob Spaulding, presidente de la Conferencia Litúrgica del Suroeste. El padre Spaulding también sirve como director de la Oficina de Culto Divino para la Diócesis de Cheyenne y es el párroco del Centro Newman en Laramie, Wyoming. El enfoque de su presentación fue sobre la Constitución sobre la Sagrada Liturgia o Sacrosanctum Concilium, primer documento promulgado por el Vaticano II.
“Una buena base en las enseñanzas de este documento nos ayuda a seguir la guía del Papa y las esperanzas del Obispo Solis para liturgias vibrantes en la diócesis,” dijo Lorena Needham, directora de la Oficina diocesana de Culto Divino.
La mayor parte de la presentación de Spaulding se enfocó en los dos primeros párrafos de la segunda sección de la Constitución sobre la Sagrada Liturgia, la cual contiene en el segundo subtitulo titulado “Necesidad de promover la educación Litúrgica y la participación activa.” Los dos primeros renglones de esta sección dicen, “La santa madre Iglesia desea ardientemente que se lleve a todos los fieles a aquella participación plena, consciente y activa en las celebraciones litúrgicas que exige la naturaleza de la Liturgia misma…”
Este énfasis en la participación del laicado en la Eucaristía es uno de los cambios esenciales a la Misa que llegó con el Vaticano II. La Constitución sobre la Sagrada Liturgia, describe la liturgia como “una acción del cuerpo entero de Cristo,” y “la liturgia es una reunión de los fieles unidos en oración,” dijo el padre Spaulding.
“No somos espectadores.” Agregó el padre. “No somos objetos de la celebración que sucede ante nosotros, sino actores en el drama. Participantes en la acción litúrgica misma. Quien preside tiene el privilegio de decir las palabras a nuestro nombre ante el Padre, y hablar por nosotros de Dios con la asamblea, pero esto lo hacemos juntos… Es la participación activa la que hace presente la presencia de Cristo.”
El padre Spaulding dijo que aún hoy en día, 60 años después del Vaticano II, muchos Católicos no tienen este entendimiento sobre la Eucaristía, así que la catequesis es necesaria en todos los niveles.
El Obispo concordó que un entrenamiento sobre la liturgia es necesario, y le pidió a los presentes a la reu-nión llevar lo que habían aprendido a sus parroquias y párrocos, y ofrecieran formación continua a todos los ministros en sus parroquias.
La renovación y formación, “son una necesidad en nuestra Iglesia para poder recapturar el entendimiento de la reverencia, del conocimiento y del amor, para así fomentar la devoción a la Santa Eucaristía,” dijo el Obispo Solis.
La hospitalidad fue otro tema subrayado por el padre Spaulding y por el Obispo Solis, así como para varias personas que asistieron a la reunión.
El padre Spaulding dijo que quienes asisten a Misa deben de sentirse parte de la comunidad parroquial, urgiendo a los presentes a crear un ambiente de bienvenida. El padre dijo que esto puede resultar difícil en el mundo multicultural de hoy en día, pero una manera de hacerlo es crear un repertorio de canciones conocidas por todo sen la diócesis.
“Veamos la diversidad no como un problema que necesita solución sino como un don increíble,” dijo el padre.
Similarmente el Obispo Solis le pidió a los presentes, “hacer algo para que, inclusive las personas que no tienen la facilidad del lenguaje, puedan tener la oportunidad de ser parte de la comunidad de alabanza del Cuerpo de Cristo.”
La Misa debe de ser una forma vibrante de alabanza que invita e inspira a que las personas “vengan y celebren como una comunidad de fe,” dijo el Obispo, pidiéndole a los presentes en la reunión que compartieran sus prácticas para apoyar al desarrollo del amor a la Eucaristía y para formar una comunidad Eucarística.
Needham dijo que la reunión fue grabada y estará disponible para las parroquias. También dijo que en los meses venideros, la Comisión Litúrgica dará seguimiento a esta reunión para implementar las metas de la Constitución sobre la Sagrada Liturgia en la Diócesis.
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