La corresponsabilidad se renueva en la Diócesis Católica de Salt Lake City

Intermountain Catholic

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Nuestra Diócesis próximamente comenzará con la Corresponsabilidad o Stewardship: Nuestra forma de Vida.

Mientras nos preparamos para comenzar con este ‘modo de vida’ en nuestra i-glesia local, Estaré presentando una serie de artículos en los cuales compartiré mis reflexiones acerca del Stewardship,

Esperando poder también comunicar mi alegría y entusiasmo acerca de esta manera de vivir nuestra fe.

En este primer artículo, me gustaría concentrarme en el tan importante punto de que la corresponsabilidad no es solo un programa que recauda fondos. Conforme las personas vayan adoptando el Stewardship, se darán cuenta de la importancia que tiene el compartir sus tesoros, así como su tiempo y talentos. Sin embargo este es solo un aspecto de la correspon-sabilidad. El decir que el Stewardship es un programa para recaudar fondos sería como decir que el beisbol es solo anotar carreras. Tal como las carrearas son un el elemento emocionante del beisbol, estas son sólo una parte de los muchos aspectos que tiene este pasatiempo nacional.

Recuerdo a un presentador quien recientemente nos dijo que cuando él se inscribió para participar en el equipo de besibal de su preparatoria, su entrenador le menciono que su primer reto sería el borrar todo lo que su tío le había enseñado acerca de lanzar una bola curva; solo entonces él podría ser capaz de volver aprender la manera apropiada de tirarla. Así es como muchos de nosotros necesitaremos borrar las nociones preconcebidas de lo que es el Stewardship antes de poder empezar a vivirlo en nuestras vidas.

Yo definiría al Stewardship como el tener la relación correcta con Dios. El estar en la ‘relación correcta’ con Dios significa que entendemos que Dios es el proveedor y nosotros los receptores. Absolutamente todo lo que soy y tengo es dado por Dios con la intención de acercarme más a Él. San Agustín lo dijo de esta manera: "Nuestros corazones no tendrán descanso hasta que descansen en ti, oh Señor" San Ignacio tocó este tema cuando nos recuerda que fuimos creados por Dios así que debemos regresar a Él en la grandeza de su reino. El principio y fundamento principal de San Ignacio dice que las personas son creadas para orar, servir y alabar a Dios Nuestro Señor, y al hacer esto salvaran sus almas.

San Ignacio creía que debemos ser indiferentes a los regalos que se nos dan y que solo debemos verlos como vehículos que nos llevaran cada vez más cerca a Dios. Con esto San Ignacio nos recuerda que "…no debemos querer la salud más que a la enfermedad, la riqueza más que la pobreza, la fama más que el anonimato, una vida larga en lugar de una corta, y de igual manera para todo, pero debemos desear y escoger solo lo que nos ayuda a estar más cerca al fin para el que fuimos creados", para ser uno mismo con Dios.

Eso fue lo que Jesús se refirió cuando dijo "Yo soy el camino, la verdad y la vida" (Juan 14:6). Jesús nos da el comienzo de nuestro camino a la existencia, Jesús es el camino y Jesús es el destino. Cuando realmente acepte esto entonces podré entender lo que significa decir que la corresponsabilidad es un modo de vida" el Stewardship me mantiene enfocado en que Dios es el centro de mi existencia. Dios es quien me da la vida, Dios es mi compañero en el camino y está involucrado en cada aspecto de mi persona y de mis relaciones. Todas mis aspiraciones, sueños y deseos tienen, de una forma o de otra, como base a Dios.

Otra forma de poner esto es decir que veo mi existencia a través de mi fe. Tal y como una vez un fotógrafo del National Geographic dijo "algunas personas dicen ‘lo creeré cuando lo vea’, pero yo les dijo ‘ lo veo cuando lo creo". Así es que encontramos a Dios en todo y a todo en Dios. El caminar cristiano es través de la fe. Basados en esta creencia, mi vida toma un nuevo significado y cada día me presenta una nueva oportunidad de acercarme más a Dios.

Resulta fácil de ver como la corresponsabilidad no es un programa, es un modo de vida, una manera de ver y responder a Dios. Esta ‘relación correcta’ con Dios cambia todo. El decir que soy un ste- ward fiel quiere decir, parafraseando a C.S. Lewis, que cada día me enamorado de Dios. Este amor no puede ser reducido a un programa tan solo puede significar mi entrada a un misterioso pasaje que hará que mi vida valga la pena.

Por favor únanse a mí en oración para que todos en nuestra Diócesis aceptemos esta manera de vida llamada Stewardship. Es un gran momento para todos y espero con ansias el poder compartirlo con ustedes. En mi próximo artículo me dedicare a la pregunta de cómo respon-der al amor y gracia de Dios en nuestras vidas. Dios los bendiga!