Sacerdotes se reúnen por última vez con el Arzobispo electo Wester

Durante el evento se le pidió hablar  al Padre Jorge Roldan, vicario parroquial de St. Mary of the Assumption en Park City, quien es el sacerdote más joven en la diócesis, ya que fue ordenado el año pasado.

“Me gustaría decir muchas cosas, pero lo más importante para mí… es esto: me enorgullece mucho el haber sido ordenado por usted”, dijo el Padre Roldan al Arzobispo electo.

El sacerdote más grande que aún esta en servicio activo, Monseñor Robert Servatius, párroco de Blessed Sacrament en Sandy, le deseó buena suerte y bendiciones  al Arzobispo electo  agregando que “No nos gusta verlo ir…. Siempre habrá una parte de usted aquí, debido a la gran influencia que ha tenido en nosotros”.

Representando al aspecto multicultural de los sacerdotes el Padre Javier Virgen, Vicario para asuntos hispanos dijo que el Arzobispo electo Wester tiene muchos dones que los laicos han notado.

“Las personas en la comunidad hispano parlante siempre me dicen ‘ese obispo tiene un don especial que Dios le ha dado; él sabe escuchar, y ser compasivo”, dijo el Padre Virgen, quien agradeció al Arzobispo electo por ofrecer Misas en español en la Catedral de la Magdalena y por formar la clase de diáconos permanentes en español, que se espera se ordenen el próximo año.

“Esos son dones que usted nos ha dado en una forma muy especial. Le estamos muy agradecidos”.

El padre Virgen expreso su gratitud personal por la compasión y ánimo del arzobispo  electo mientras paso por un trasplante y por la diálisis.

“Le agradezco su compasión, su amor y sus cuidados, no solo para mí sino para todos nosotros, los sacerdotes”, dijo el padre Virgen.

Durante sus comentarios le Arzobispo electo Wester dijo que las noticias de su cambio le llegaron de sorpresa; ya estaba haciendo planes para retirarse en Salt Lake City para su cumpleaños 70. 

Sin embargo, como sus sacerdotes debe responder cuando se le reasigna  así que ahora “Oro muy fuerte para que tengan un sucesor muy amoroso y le envidio”, dijo el arzobispo  electo con la voz entrecortada por las lágrimas. “El los tendrá a todos ustedes. Eso es un gran don… va a ser muy pero muy afortunado de tenerlos y de contar con tan maravillosos diáconos y con tan maravillosos lideres laicos y con tan maravillosa gente de aquí… Siempre los llevaré en mi corazón”.

Conforme la velada llegó a su fin el Padre Martin Díaz, quien fungió como maestro de ceremonias, habló con lágrimas diciendo “Realmente no hay nada más que decir más que ‘Se lleva nuestros corazones’. Ha sido un gran privilegio estar en esta diócesis con usted”.